07 December 2010

Nunca te dije lo mucho que todos los hombres que no eran tú me elogiaron los besos.

Nunca les dije a ellos que creí que sólo les transmitía el anhelo fortísimo y la nostalgia de ti. Que jamás pensé que de verdad besara bien; sino que era un simple traspaso.

No había querido poner por escrito ni había querido decirme a mi misma que sí, que a cada uno de esos que no eran tú, los besé deseando que no fueran ellos, engañada.

Creyendo que eras tú.

13 November 2010

"Y la prisa venía porque tenía conciencia de que lo que no oyera ahora ya no lo iba a oír; no iba a haber una repetición, como cuando uno oye una cinta o ve un vídeo y puede retroceder, sino que cada susurro no aprehendido ni comprendido se perderá para siempre jamás. es lo malo que tiene cuanto nos sucede y no es registrado, o aún peor, ni siquiera sabido ni visto ni oído, porque luego no hay forma de recuperarlo. el día que no estuvimos juntos ya no habremos estado juntos, o lo que se nos iba a decir por teléfono cuando nos llamaron y no respondimos, nunca será dicho, no lo mismo ni con el mismo espíritu; y todo será levemente distinto por nuestra falta de atrevimiento que nos disuadió de hablaros. Pero incluso si aquel día estuvimos juntos, o estábamos en casa cuando nos telefonearon, o nos atrevimos a hablaros venciendo el temor y olvidando el riesgo, aún así nada de ello se volverá a repetir, y por consiguiente llegará un momento en el que haber estado juntos será como no haber estado y haber descolgado el teléfono será como no haberlo hecho, y habernos atrevido a hablaros como haber callado. Hasta las cosas más imborrables tienen una duración; cómo las que no dejan huella o ni siquiera suceden, y si estamos prevenidos y las anotamos o las grabamos o las filmamos, y nos llenamos de recordatorios e incluso tratamos de sustituir lo ocurrido por la mera constancia y registro y archivo de que ocurrió, de modo que lo que en verdad ocurra desde el principio sea nuestra anotación o nuestra grabación o nuestra filmación, sólo eso; aun en ese perfeccionamiento infinito de la repetición habremos perdido el tiempo en el que las cosas acontecieron de veras (aunque sea el tiempo de la anotación); y, mientras tratamos de revivirlo o reproducirlo o hacerlo volver e impedir que sea pasado, otro tiempo distinto estará aconteciendo y en ese, sin duda, no estaremos juntos ni cogeremos ningún teléfono ni nos atreveremos a nada ni podremos evitar ningún crimen ni ninguna muerte (aunque tampoco lo cometeremos ni la causaremos) porque lo estaremos dejando pasar de lado como si no fuera nuestro en nuestro intento enfermizo de que no termine y regrese lo que ya pasó. Así, lo que vemos y oímos acaba por asemejarse y aún igualarse con lo que no vimos ni oímos, es sólo cuestión de tiempo, o de que desaparezcamos. Y a pesar de todo, no podremos dejar de encaminar nuestras vidas hacia el oír y el ver y el presenciar y el saber con el convencimiento de que esas vidas nuestras dependen de estar juntos un día o responder una llamada, o de atrevernos, o de cometer un crimen o causar una muerte y saber que fue así.
A veces tengo la sensación de que nada de lo que sucede sucede, porque nada sucede sin interrupción, nada perdura ni persevera ni se recuerda incesantemente, y hasta la más monótona y rutinaria de las existencias se va anulando y negando a sí misma en su aparente repetición hasta que nada es nada ni nadie es nadie que fueran antes, y la débil rueda del mundo es empujada por desmemoriados que oyen y ven y saben lo que no se dice ni tiene lugar ni es cognoscible ni comprobable. Lo que se da es idéntico de lo que no se da, lo que descontamos o dejamos pasar idéntico a lo que tomamos o asimos, lo que experimentamos idéntico a lo que no probamos, y sin embargo nos va la vida en escoger y rechazar y seleccionar, en trazar una línea que separe estas cosas que son idénticas y haga de nuestra historia una historia única que recordemos y pueda contarse. Volcamos toda nuestra inteligencia y nuestros sentidos y nuestro afán en la tarea de discernir lo que será nivelado, o ya lo está y por eso estamos llenos de arrepentimientos y de ocasiones perdidas, de confirmaciones y reafirmaciones y ocasiones aprovechadas, cuando lo cierto es que nada se afirma y se va perdiendo. O acaso es que nunca hubo nada."

- Javier Marías

12 October 2010

A CLOUD

One evening in the blue month of September
we lay at peace beneath an apple bough;
I took her in my arms, my gentle lover,
and held her closely like a dream come true -
while far up in the tranquil summer heaven
there was a cloud, I saw it high and clear.
It was so white and so immense above us
and, as I watched, it was no longer there.

Since then so very many different evenings
have drifted blindly past in the general flow.
Perhaps the apple orchard has been flattened;
and if you ask me where the girl is now
I have to admit I really don't remember.
I can imagine what you're going to say
but even her face I truly can't recapture;
I only know I kissed it there that day.

Even the kiss I would have long forgotten
if that one cloud had not been up there too -
I see it and will always see it plainly,
so white and unexpected in the blue.
Perhaps the apple boughs are back in blossom,
maybe she holds a fourth child in her knees;
The cloud, though, hung there for a moment only
and, as I watched, it broke up in the breeze.

- Bertolt Brecht

13 September 2010

New Orleans

Me gustan las ciudades viejas. Pero también me gusta la música vieja, la ropa vieja, la pintura vieja, las viejas ilustraciones, los libros con olor y textura avejentados, las mezclas de cosas que se dejan cocinar por unos cuantos cientos de años, y una vez me dijeron "Tu eres un alma muy vieja". Supongo que se capta la idea. Supongo que no tengo que explicar las razones por las que New Orleans me gustó mucho más que Houston.

12 September 2010

Houston

Es cierto que los viajes nos enriquecen. Aún más cierto es que decirlo parece para muchos ridículo y pretencioso; no para mí, quizá porque soy suficientemente ridícula, no me importa nada. Y aún convencida de ello, se me ocurrió que a lo mejor los viajes son innecesarios, que sólo sirven para echar de menos tantas cosas, sentirse sólo y perdido y extrañar a todos de rebote, incluyendo en el camino hasta al taquero de la esquina. Para exacerbarse como poblador de una morusa del planeta que no interesa a nadie; que la amplitud de los horizontes y el redimensionamiento de la vida cotidiana son cosas que sólo tienen cabida en la mente del que viaja y nadie más.

¿Para qué viajar entonces?

Porque al final, sentirse parte de un lugar, y entenderlo y quererlo es lo que hace que lo extrañemos, porque somos personas y necesitamos saber que si no estamos alguien nos extrañará, que si volvemos a alguien le dará gusto. Tan simple como que una de las mejores sensaciones en la vida es que alguien te reciba con una sonrisa y te pregunte cómo estuvo todo, si la pasaste bien, y que sea totalmente evidente en su cara que se alegra de tenerte de regreso. Porque no se puede no ser de ningún lado. Porque no se ancla el corazón en los lugares, sino en las personas. Y porque la comida mexicana se extraña demasiado, chingao.

Quizá lo realmente innecesario es hacer crónicas de viaje.

Pero tampoco me importa mucho.
Aquí va la mía en imágenes.


03 August 2010

Guanajuato (más)

Guanajuato es MÍO y puedo darme el lujo de ya sólo registrarlo en encuadres cerrados.

Eso diría si fuera yo muy artista, la verdad es que sí voy mucho a Guanajuato y a la fecha me sigue pareciendo altamente bonito.


02 August 2010

Eureka

Voy a explicar por qué está todo ancestralmente mal. Es porque los prehispánicos pensaban así:

Masculino ---------- Femenino
  • hoguera agua
  • luz oscuridad
  • vida muerte
  • fuerza debilidad
  • águila jaguar
  • gloria sexualidad
  • arriba abajo
  • consunción inflamación
  • irritación dolor agudo
  • perfume fetidez

Ahora, esto no justifica nada, solo explica que los hombres son ancestralmente unos idiotas.

De nada.

20 July 2010

BAAXAL TUUCH'BIL JU'UN
K'aasaje
báaxal tuuch'bil ju'un ku xik'nal.
Teech choolik junjunp'iti,
kíimak a uol tu xik'nal.
Ken jach kanchake
ku téep'el u súumil a k'ajlaye
ka kutal a chant u payk'abtal tumén náachil.


PAPALOTE
El recuerdo
es un papalote.
Poco a poco le sueltas,
disfrutas su vuelo.
En lo más alto
se rompe el hilo de tu memoria
y te sientas a presenciar cómo lo posee la distancia.


- Briceida Cuevas Cob, maya

18 July 2010

- Stop talking about love. Every asshole in the world says he loves somebody. It means nothing.
- But it's true.
- It still doesn't mean anything! What you feel only matters to you. Is what you do to the people you say you love, that's what matters. Is the only thing that counts.


¿Muy parecido a esto, no?

13 July 2010

Extranjerismos

No frecuentemente logramos vernos con los ojos del otro, de ese que no pertenece y casi siempre está de paso. El que habla diferente, no entiende cosas, no conoce sabores y las frases cotidianas le hacen gracia; no son cotidianas para él. Nos damos cuenta de lo que sí somos, por todo eso que el otro no es, aprendemos un poco a entender las cosas desde fuera de nosotros. Y qué se le va a hacer, nos encanta vernos con los ojos del otro que están siempre llenos de novedad.

Yo tuve durante mucho tiempo la comezón de enseñarle ese mundo todo a un otro particular. Por practicar mentalmente me hice a la idea de ser la forastera y me gustaba. Finalmente llegó alguien a quien mostrarle lo propio con cara de extranjera. Era otro otro, no el que yo esperé ni el que quise incluir en mi vida de todos los días. No mejor ni peor. Otro.

06 July 2010

"Para Anabelle, las cosas eran muy diferentes. Por las noches antes de dormirse, pensaba en Michel; se alegraba de volver a pensar en el cuando despertaba. Cuando en clase le pasaba algo divertido o interesante, enseguida pensaba en contárselo a él. Los días en que, por la razón que fuese, no se habían visto, se sentía inquieta y triste. Durante las vacaciones de verano (sus padres tenían una casa en Gironde) le escribía todos los días. Incluso si no se lo confesaba con franqueza, incluso si sus cartas no eran nada apasionadas y más bien se parecían a las que le habría escrito a un hermano de su edad, incluso si el sentimiento que impregnaba su vida recordaba a un halo de dulzura más que a una pasión devoradora, la realidad que cada día estaba más clara para ella era ésta: de buenas a primeras, sin haberlo, buscado, sin ni siquiera haberlo deseado, había encontrado a su gran amor. El primero era el bueno, no habría otro, y no tendría ni que hacerse la pregunta, (...) el caso era posible; no había que hacerse ilusiones, casi nunca ocurría, pero en algunas ocasiones extremadamente raras, casi milagrosas -aunque más que probadas-, podía ocurrir. Y era lo más maravilloso que le podía suceder en la vida."

- Michel Houellebecq

28 May 2010

Bolsa

Creo que hago ésto por todos aquellos hombres que me dijeron alguna vez que si podían ver que cargaba en mi gigantesca bolsa, y no los dejé. Eso y ésto

¿Qué ganas de ver lo que hay en las bolsas de las mujeres, really?

25 May 2010

Zacatecas II

Nota del autor: Los nombres de ciudades pueden o no sustituir otros nombres.


Guanajuato y Zacatecas se parecen muchísimo. Viejas ciudades coloniales, mineras, asentadas entre cerros las dos. Creo, inclusive, que fueron fundadas en el mismo año, con el mismo protocolo y título.

Las ciudades, los lugares, tienen que ver siempre con las personas que hay ahí; (a quienes se conoce apenas, a quienes se visita) pero recién se me ocurrió que quizá sean las ciudades también personas en sí mismas. Tienen modos de recibir y carácter diferentes, se alimentan, crecen, huelen, te hacen sentir distinto cuando las dejas y te vuelves a casa, ordenan las cosas cada una según sus propios criterios. Si las pierdes de vista por un tiempo, cuando las encuentras de nuevo han cambiado y has cambiado, pero sigue todo en esencia siendo lo mismo. Como con la gente.

Siendo así, Guanajuato es mi guapo amigo fiestero y cercano, del que te enamoraste en secreto tantas veces, al que adoras pero no puedes ver cada finde porque se haría horrible todo. Y Zacatecas debe ser el exnovio que besa tan bien que no importa nada más. El de los recuerdos entrañables por viejos, y la relación atormentada de la que eventualmente te permites un revolcón de esos de toda la madrugada, con todo y mañanero.

Y bueno, fuí a Zacatecas éste finde.


11 May 2010

"Teresa repitió en voz alta: No me ama. Al llegar a la palabra clave, apretó los labios y pronunció amma, sintiendo en ellos la presión de un beso. Eso la consoló y cerró los ojos. Luego apartó las patatas que acababa de pelar, se secó las manos en el delantal y abrió la puerta que daba a su cuartito."

- Elias Canetti

02 May 2010

Jalpa de Cánovas

Buscar de donde venimos, rastrear orígenes, es algo que hacemos todos, todo el tiempo. Casi siempre de manera no conciente. Los trayectos explican lo que somos ahora.

Ayer recién me di cuenta que una parte desconocida y vieja de mí hay que rastrearla desde Jalpa de Cánovas, municipio de San Pedro Piedra Gorda (Purísima de Bustos).

30 April 2010

"No pocas veces encontraba Kien, en calles o librerías, gente bárbara que lo dejaba de una pieza con declaraciones de índole personal y humana. Para borrar impresiones que no avalasen su desprecio por la masa, efectuaba en esos casos un pequeño cálculo. ¿Cuántas palabras articulará este individuo al día? Como mínimo diez mil, de las que sólo tres tendrán sentido. Son las que por casualidad, yo he oído. Basta con verle la cara para adivinar los cientos de miles de palabras que afluyen diariamente a su cerebro, las que piensa y no pronuncia: una sandez detrás de otra. Por suerte no las oímos."

- Elias Canetti

19 April 2010

Pedacera

Hay partes de mí por todos lados. Algunas las veo y las reconozco, pero la mayor parte andan rodando por ahí, se atoran en las esquinas, se enredan con las pelusas y el cabello que se me cae, se escapan por las rendijas de las ventanas, se me van con el polvo cuando barro mi casa (eventualmente barro mi casa).

No las traigo puestas todas estas partes de mí, porque son cosas o lugares; quizá sólo existen en otras personas, sólo se ven con la luz de cierta hora del día, o son pensamientos y a veces da flojera cargarlas, así que se quedan ahí, para que me las encuentre luego. Pero no siempre las vuelvo a encontrar. Muchas huyeron de mí o se las llevó alguien; me toma mucho tiempo darme cuenta que ya no las tengo, porque estoy revuelta y no se notan los huecos.

Trato siempre de registrarlas. Me volví maniática. Pero no sirve de nada, sigo perdiendo partes de mí todo el tiempo.

09 April 2010

Sayulita II

He viajado mucho. Lo digo sin afán presuntuoso. He viajado casi nada en comparación con tanta gente, y aún así siento que he viajado mucho.

Viajé de huida, de olvido, de distracción. Lo he hecho intencionalmente, con planes preparados, presupuestos anchos y estrechos. Por corto impulso y quizá sólo para disfrutar el trayecto; he viajado siendo una tonta y pretendiendo tontamente que soy una viajera experta. Viajé en temporadas altas y bajas. En fines de semana cualquiera. En puentes institucionales. Caminé sola por algún país desconocido, caminé con alguien a quien amaba, caminé con amigos, con familia; en lugares donde te sirve conocer idiomas y en lugares donde sólo sirven las sonrisas, y donde estuve fui siempre bien recibida, aunque la gente no es maravillosa en general -la gente es gente- siempre me dieron algo memorable, algo hermoso.

A los lugares no se vuelve nunca. A veces uno no quiere regresar; habrá sido un viaje demasiado bueno para superar, demasiado malo para repetir, muy poco importante como para ponerlo en punto de comparación. Otras veces uno vuelve, como esa vieja idea de quien no se baña jamás en el mismo río -que en todas las culturas es la imagen del transcurso- cuando todo se volvió otro.

Yo volví al Sayulita físico al que hace casi un año fui. Traje tanto de regreso que no cabíamos en el auto.

30 March 2010

Niñerías

Casi eramos niños cuando creí que estaríamos juntos cuando menos el tiempo que estuvieramos vivos, a pesar de que nunca sucedió. Uno cree esas cosas, a veces. Es un juego. Es un sueño. Se sueña porque con algo se tiene que soñar y es así. No daña a nadie, es lindo, hace sonreir.

Después de tiempo, cuando regresé y abrí la puerta me ví a mi misma soñando. Me regañé, por estúpida, por desperdiciar el alma y esperar un porsiempre que no iba a llegar. Me mandé al rincón a pensar en lo que había hecho e intenté castigarme sin dinero y sin salidas pero qué se le va a hacer, no soy tan dura conmigo misma. Además soy necia, los castigos no me hacen entender; evidentemente eso no funcionó.

Intenté entonces castigarte, niño malo, por no entregar un porsiempre decente. Escrito sobre el renglón, con la fecha en cada plana, dibujado sin salirse de la rayita, de cien palabras sobre lo que habías hecho en las vacaciones; con adjetivos, adverbios y conjugado en futuro. Pero se me había acabado la fuerza intentando castigarme y lo pasé por alto. O eso creí.

Luego vi que todo mundo decía que los castigos no funcionan y se me ocurrió hablarlo.

- Eres tonta - me dijo la voz aniñada de mí misma.

- ¿Soy?¿Más que tú?

- Porsiempre llegó - dijo, ignorando que me acababa de insultar y que yo pretendía que no me importaba- ¿no lo viste? estuvo todo el tiempo.

- Si, debo ser tonta entonces, porque no lo ví. - Le contesté con ironía.

- Es que se arregla diferente hace tiempo. Igual no se ve tan lindo; ahora va de lamismamierda. Es normal que no lo hayas reconocido - me dijo con condescendencia, haciendo cara de que lo sabía todo, la mocosa impertinente.

Pero ahí me quedé callada. Malditos niños que tienen la razón.

29 March 2010

One Art

The art of losing isn't hard to master;
so many things seem filled with the intent
to be lost that their loss is no disaster.

Lose something every day. Accept the fluster
of lost door keys, the hour badly spent.
The art of losing isn't hard to master.

Then practice losing farther, losing faster:
places, and names and where it was you meant
to travel. None of these will bring disaster.

I lost two cities, lovely ones. And, vaster,
some realms I owned, two rivers, a continent.
I miss them, but it wasn't a disaster.

--- Even losing you (the joking voice, a gesture
I love) I shan't have lied. It's evident
the art of losing's not too hard to master
though it may look like (Write it!) like disaster.

-Elizabeth Bishop

04 March 2010

Coincidencias

Una de mis mejores amigas y yo nos decimos puta, con un cariño que no creo que exprese ninguna otra palabra. Nos decimos, de hecho, mi puta, porque es ya una cosa de pertenencia. Nos conocimos hace no demasiado, pero parece que hubiéramos estado juntas la vida entera, quizás porque nos conocimos en momentos raros de nuestras vidas, y quién sabe si desde entonces o por eso tuvimos siempre una conexión inexplicable: pasamos por periodos similares y simultáneos, aún hoy que no estamos mucho tiempo juntas.

Fuimos la peor de las compañías para la otra mientras estuvimos las dos deprimidas, incomprendidas, inconsolables y nos tomábamos el Jack Daniels como agua de jamaica; casi en bolsita. Contentas no cabíamos por las calles o en los coches o en las sillas de los bares donde nos sentábamos a chocar cervezas y cambiar sonrisas una con otra, historias casi iguales y risitas de complicidad duplicadas por los buenos tiempos aquí y allá.

Nos solemos extrañar en los mismos momentos y nuestros exes tienden a reaparecer (los exes siempre reaparecen) por las mismas fechas. A saber si ellos dos se llegarían a caer bien si se conocieran, lo cierto es que cuando menos nos ponían a sufrir por las mismas razones y con los mismos estúpidos motivos. Y no nos quedaba más refugio que las explicaciones de la otra, que sonaban por demás lógicas.

A su papá diabético le tuvieron que amputar un dedo del pie igual que a mi abuelita diabética.

Hace poco me contó que se había vuelto a ver con su ex, el de mil años, el de la relación que parece que no acaba nunca. El de las historias constantes lindas y tristes y feas, pero como referencia siempre. Como historia siempre.

Y tengo una puta curiosidad de saber como le está yendo con eso.

25 February 2010

"Todo lo que nos sucede, todo lo que hablamos o nos es relatado, cuanto vemos con nuestros propios ojos o sale de nuestra lengua o entra por nuestros oídos, todo aquello a lo que asistimos (y de lo cual, por tanto, somos algo responsables), ha de tener un destinatario fuera de nosotros mismos y a ese destinatario lo vamos seleccionando en función de lo que acontece o nos dicen o bien decimos nosotros mismos. Cada cosa deberá contarse a alguien -no siempre el mismo, no necesariamente-, y cada cosa va poniéndose aparte, como quien ojea y aparta y va adjudicando futuros regalos una tarde de compras. Todo debe ser contado al menos una vez, aunque, como había determinado Reynolds con su autoridad literaria, deba ser contado según los tiempos. O lo que es lo mismo, en el momento justo y a veces nunca más si ese momento justo no se supo reconocer o se dejó pasar deliberadamente.

Ese momento se presenta a veces (las mas) de manera inmediata, inequívoca y apremiante, pero muchas otras veces se presenta sólo confusamente y al cabo de lustros o decenios, como sucede con los mayores secretos. Pero ningún secreto puede ni debe ser guardado siempre para todo el mundo, sino que está obligado a encontrar al menos un destinatario una vez en la vida. Una vez en la vida de ese secreto.

Por eso algunas personas reaparecen.

Por eso nos condenamos siempre por lo que decimos. O por lo que nos dicen."



- Javier Marías

22 February 2010

"No son las palabras lo que importa. Tampoco las acciones. Uno dice "buenos días", "cómo estás", "da lo mismo", "te quiero", "perdóname" y, después de todo, no significa nada. Uno hace tal o cual cosa y eso resulta como decir "no sé lo que hago". Por principio de cuentas, los otros interpretan palabras y acciones a su manera, como quieren o pueden entenderlas. Lo que importa, al fin y al cabo, son las consecuencias. Está la realidad y uno tiene la obligación de calificar lo que ha dicho o lo que ha hecho. Obligación de aceptar, de asumir, de no engañarse. Lo que importa son las sorpresas que uno se lleva, después."

- Juan Vicente Melo

09 February 2010

Extrañamientos

En español decimos extrañar, como si habláramos de algo que nos es extraño, raro, y no lo alcanzamos a comprender quizá porque está ya lejos y ha cambiado en su forma o en su esencia al punto en el que se volvió extranjero: está fuera del mundo que nos es cotidiano, y se echa de menos o se echa en falta, con una afortunada imagen en la que nos podría alguien aventar en la cara el hueco que falta de un todo. De nuestro todo.

Las traducciones, que nunca son exactas, lo escribirían como miss, en inglés, aunque la palabra más bien describa algo que simplemente se ha perdido. Lo que se falló en percibir y se ignoró; un evento al que no se asistió, el tren que no se pudo tomar, algo que nomás no fué experimentado.

Se habla en portugués de saudade, ni siquiera como un verbo que cualquier persona podría realizar, sino como un ente que hay que sentir porque hasta en su misma calidad gramatical no nos pertenece, está fuera de nosotros y llega en algún momento, en cualquier momento, y conjuga la nostalgia, el anhelo, la añoranza, la esperanza (para las que, evidentemente, en español tenemos palabras específicas que no solemos juntar porque no parece emocional ni semánticamente aceptable).

Los conceptos de las palabras, aunque pudieran traducirse, son muy diferentes en estos idiomas y por lo tanto lo serán las sensaciones que describen y que sentirán las personas que los hablen. Yo no podré mas que extrañar, aunque entienda lo que significa I miss you o sentir saudades; y con ciertas licencias literarias podré extrañar los eventos a los que no asistí, las cosas que no experimenté, los trenes que no pude tomar porque seguramente llegué tarde, todo lo que se ha perdido; y podré hacerlo con esa nostalgia, anhelo y sentimiento raro, feliz y triste, que describen las saudades que por ahí se sienten.

Podría decir que extraño ese guacamole suyo que no probé, que extraño su departamento nuevo en el que no he puesto un pie, que añoro los momentos que justo ahora no estamos pasando juntos y los que ya nunca vamos a tener.

Podría.

Pero las licencias poéticas normalmente no me juegan a favor, así que mejor no decirlo, al fin que en español ni siquiera tiene sentido.

05 February 2010

Invitación al vómito

Cúbrete el rostro
y llora.
Vomita.
¡Si!
Vomita,
largos trozos de vidrio,
amargos alfileres,
turbios gritos de espanto,
vocablos carcomidos;
sobre esta nauseabunda iniquidad sin cauce,
y esta castrada y fétida sumisión cultivada
en flatulentos caldos de terror y de ayuno.
Cúbrete el rostro
y llora...
pero no te contengas.
Vomita.
¡Si!
Vomita,
ante esta paranoica estupidez macabra,
sobre este delirante cretinismo estentóreo
y esta senil orgía de egoísmo prostático:
lacios coágulos de asco,
macerada impotencia,
rancios jugos de hastío,
trozos de amarga espera...
horas entrecortadas por relinchos de angustia.

- Oliverio Girondo

02 February 2010

“Es decepcionante, ¿No? -se burló Wolf- ¿Tienes miedo de que me sienta decepcionado cuando haya olvidado todo? Es preferible sentirse decepcionado a seguir esperando en el vacío.”

- Boris Vian.

29 January 2010

Ya no odio la feria [(tanto) creo]

El año pasado estuve haciendo cosas, escuchando música y yendo a lugares que en algún momento de mi vida odié y por algún extraño motivo pude encontrarle la chistosidad (¿chistosismo?) y generalmente me la pasé bien. Hasta que la semana pasada me dijeron "Vamos a la Feria" y titubeé así, muchísimo. Y luego fuí: ví muchos animalitos y me subí a uno de esos juegos en los que pagas por un par de minutos de sufrimiento, compré triquecitos varios y me comí unos de esos huaraches que a todo mundo le hacen daño menos a mí y a mi casi inexpugnable aparato digestivo. Es que soy bien cultural, yo.

Y bueno, la Feria sigue teniendo todo lo que odio: congestionamiento vial, multitud apestosa y empujona, olor a fritanga, niños chillones a cada paso, coca light a precios estratosféricos y n-mil etcéteras, pero ese día yo andaba de buenitas y con gente linda y todo estuvo bien.

Tiro al blaco (sin n) sport (sin nada deportivo)

Descubrí donde estaban todos los ponies que nunca tuve en mi infancia; bien aburridos amarrados en un carrusel de carne y hueso. Cositos.

Restricción más extraña del mundo

Vaquitas que se aman y se miran a los ojos. Vargas Llosa decía que enamorarse como un becerro es el único modo válido de enamorarse. Seguro también anduvo en la Feria.

¿Habrá toros pelichivo? ¿Gatos peliperro? ¿Caballos pelivaca?

Ahora; yo nunca he ido al muy famoso Palenque de la Feria... ¿Ya va siendo tiempo, o me espero a ver si el siguiente año ando más de buenitas?